No contrate a un técnico colaborador de una empresa constructora.

Desconfíe de cualquier técnico que va de la mano de una empresa constructora. Siempre será aconsejable separar por una parte de empresa constructora que realiza cualquier obra, del técnico independiente (Dirección Facultativa) que controla la calidad de los trabajos y las unidades de obra realmente ejecutadas.

Es frecuente últimamente casos donde una empresa constructora “regala” a una Comunidad de Propietarios los trabajos de dirección de obra del técnico encargado de dirigir los trabajos de rehabilitación de un inmueble. Es decir, la constructora convence a la Comunidad de Propietarios de que las labores de dirección de obra las realizará un técnico vinculado a la empresa constructora, y por ese servicio no cobrará nada. Aparentemente parece una propuesta ventajosa para esa Comunidad de Propietarios, pero no es así.

¿Por qué cree que esa empresa constructora le ofrece algo gratis?. Obviamente las empresas están en el mercado para ganar dinero, a no ser que fuera una ONG, pero entonces ¿por qué lo hace?. Nosotros los Arquitectos, Aparejadores e Ingenieros de la Edificación en nuestro quehacer diario debemos dirigir obras, se trata de una labor que requiere el control de la calidad de los materiales, la supervisión de los correctos acabados de las reparaciones, aprobar cualquier modificación en los métodos de trabajo en función de las sorpresas que nos encontramos conforme avanzan los trabajos. En definitiva debemos tomar decisiones que afectan a la calidad del resultado final, y que implicará un lucha continua y diaria con la correspondiente empresa constructora, que intentará convencernos de ejecutar determinadas partidas de obra a su conveniencia, lo cual le redundará un mayor beneficio, a expensas de una menor calidad y durabilidad en el resultado final.

Se trata de una toma y daca, donde yo te exijo esto a cambio de que me hagas aquello, pero siempre defendiendo los intereses de nuestro cliente, que siempre es la Comunidad de Propietarios promotora de las obras.

Cualquier técnico propuesto por esa empresa constructora, y mucho peor al servicio de la misma, no va a poder ejecutar correctamente su trabajo. No podemos luchar si tenemos una mano, o las dos, atadas a la espalda. Pues eso pasa con la dependencia económica o profesional entre empresas constructoras y técnicos.

Por tanto, desconfíe de aquellos técnicos que van de la mano de cualquier constructora, lo aparentemente barato, al final le saldrá caro.

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